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#LoboConCaperuza: Hablando en plata  

Luis Téllez-Tejeda | 30.07.2018
#LoboConCaperuza: Hablando en plata  
#LoboConCaperuza es el blog de Luis Téllez-Tejeda y forma parte de los #BlogsEP

 Sé, por distintas anécdotas y experiencias, que hay editoriales dedicadas a publicar libros para niños que tienen listas de los temas que no deben tocarse en las obras que imprimen. A veces la relación de dichos tópicos es real, está impresa y se la dan a los autores recién contratados para producir algún texto dirigido a los tiernos ojos de los lectores más jóvenes; en otros casos sólo se da por sentada y se alude a ella cuando algún intrépido escritor les hace llegar un manuscrito en el que se habla, además de una historia de amistad entre dos niños en una unidad habitacional, de los cultivos transgénicos y su relación con la desaparición de insectos en algunas regiones del planeta.

            “A los niños eso no les interesa”, “luego en las escuelas nos rechazan los libros que hablan de cosas complicadas”, “los vendedores luego no saben defender esas obras”; ninguna respuesta sensata recibe el escritor, sólo que hay temas que los libros para niños —al menos los que ellos publican y que, se sabe, piensan que son la totalidad y los mejores— no deben tocar.

            Justo durante la niñez es cuando somos más curiosos, cuando aprendemos a comprender el mundo y sus fenómenos. Pero a los adultos siempre nos da miedo explicar y huimos de las preguntas, porque cada respuesta requiere sensatez y paciencia. Yo, por mi lado, tengo una lista de temas no prohibidos, sino difíciles de explicar, y mientras cumplo el sueño de tener una editorial que se dedique exclusivamente a hacer libros sobre ellos, la voy aumentando.

            Una de las primeras cuestiones apuntadas en mi enumeración es ¿por qué existe el dinero? Creo que es mucho más fácil explicarle a un niño cómo funciona el aparato reproductor de los seres humanos, que hablarle del dinero. Alrededor del tema “dinero” comienzan a brotar otros temas que dificultan, aún más, la explicación: riqueza, pobreza, trabajo, salario, desigualdad social, capitalismo y comunismo, por decir unos cuantos.

            Digo, porque si uno le va a explicar algo a un niño, hay que explicárselo bien, de pe a pa y contestando las preguntas que haga. Aceptémoslo, a los niños les interesa saber cómo funciona el mundo y el mundo en el que viven se mueve por esa intangibilidad que, a veces, traemos en la cartera: el dinero. Y sí, tarde o temprano, preguntarán sobre qué sucede con esos papelitos que cambiamos por helados o camisetas. Quizá después se pregunte (nos pregunte) por qué hay quien no tiene dinero y sí, todo comienza a volverse más difícil de exponer.

            Si quien me lee se ha enfrentado a tales cuestionamientos y se ha deshecho en preguntas a sí mismo sobre cómo responder, Comunismo para todxs de Bini Adamczak, publicado por Akal, será una gran herramienta en la tarea de explorar cómo los seres humanos nos hemos relacionado con las formas de producir riqueza. Cada capítulo abre con una pregunta sencilla de plantear y, en los términos en que se redacta el libro, también de contestar. Más que únicamente hablar sobre cómo opera el mundo actual a partir del dinero, el libro hace planteamientos éticos respecto a la libertad, el trabajo y la posibilidad de marchar hacia un mundo en el que las personas valgan por sí mismas y no por la explotación que hagan de otros, entreverando las respuestas a preguntas que los propios niños se hacen como ¿Qué es el mercado? o ¿Qué es la crisis?

            Ya entrados en cuestionar el statu quo económico, recientemente vio la luz El dios dinero, un elegante álbum publicado por El Zorro Rojo con ilustraciones de Maguma y que reúne algunos de los postulados de los Manuscritos económicos y filosóficos de 1884 de, nada más y nada menos que, Karl Marx. En este libro se hace énfasis de la esclavitud en la que las cosas materiales mantienen a las sociedades actuales, las ilustraciones son elocuentes y muestran de forma alegórica la decadencia de la humanidad frente al dinero.

            Tomando el sol como metáfora del ideal comunista: una estrella que no es de nadie y brilla para todos, Ana Romero construye en Los rojos camaradas —publicado por SM con ilustraciones de Natalia Gurovich— una emotiva fábula sobre la búsqueda de respuestas: el abuelo Tomatías ha muerto y Lobo, su nieto, se ha quedado con la duda de qué es el comunismo, si bien, esta obra no da respuestas puntuales como las dos ya mencionadas, sí invita a charlar sobre cómo quería Tomatías que fuera la vida de todos. Por fortuna hay editoriales que no tienen índices de aquello que no debe ser nombrado frente a los niños, y para mayor fortuna (y diversión) hay autores osados que se atreven a exponer cómo funciona el mundo en sus más imbricados recovecos, como el dinero.

 

*La ilustración que acompaña esta entrada es de Natalia Gurovich. 

 

 

           

 

           

           

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